sábado, 11 de septiembre de 2010

La vuelta a casa







Después de unos días por aguas menorquinas llega el día en que hay que arriar velas y poner rumbo hacia Barcelona pasando antes por Ciutadella con el fin de repostar. Llevamos dos días intentandolo pero el viento de morro nos lo impide. Hasta que por fin baja de intensidad y aprovechamos la tregua para acercarnos a su puerto y su tan ansiada gasolinera. Pero el destino, a veces caprichoso, nos pone de nuevo en tensión esperando toda la mañana que el Sr. de la gasolinera nos deleite con su inestimable presencia, y manguera en mano llene las tripas del Mabrouk para poder llevar a cabo el último tramo que le queda para alcanzar su casita. Esta vez los astros nos son favorables y a las 2 de la tarde ponemos rumbo Barcelona donde atracamos el Mabrouk entre las dos torres que otean el mar para que repose un poquitín de su tan largo viaje.

Acaba así el periplo por mares helénicos que ha durado más de un añito, una aventura que ha sido posible gracias a la confianza que habéis dipositado todos vosotros en el Mabrouk y en su patrón. Gracias a todos los que habéis compartido con nosotros la ida y vuelta del Mabrouk desde el Peloponeso a Barcelona, ya sabéis que la próxima parada es en el Caribe...allí os vemos...o en las Azores si preferís!!
Iasas tripulantes!!

1 comentario:

  1. Benvinguts a casa Mabrouknautes !
    Va estar una gran aventura fer la travessa amb vosaltres. Per a mi es un dels millors records de la meva vida.
    Una forta abraçada,
    Fina i Dodeca.
    PD.: Aviam si os podem saludar un dia d'aquests.

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